jueves, 30 de octubre de 2008

POBREZA EN VENEZUELA 1998-2008

PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA



La República Bolivariana de Venezuela es un país con abundante recursos, incluso ingentes yacimientos de petróleo que eran el pilar de su economía, se ha visto sacudida en los últimos decenios por episodios de inestabilidad política, crisis económicas y profundas divisiones en la sociedad; sufre un empobrecimiento progresivo de su población ya que los largos años de retroceso económico agravan terriblemente la pobreza, que tiene raíces tradicionales e históricas. La pobreza y extrema pobreza es un fenómeno que tiene muchas dimensiones, por lo que no existe una única manera de definirla, la mayor parte de las veces, se ha definido la pobreza como la incapacidad de una familia de cubrir con su gasto familiar una canasta básica de subsistencia. Este enfoque metodológico clasifica a las personas como pobres o no pobres. Similarmente, en el caso de que el gasto familiar no logre cubrir los requerimientos de una canasta alimentaría, se identifica a la familia como pobre extrema. Combinando ambas definiciones, una familia puede ser no pobre, pobre o pobre extrema. Si bien existen otras aproximaciones metodológicas muy importantes, ésta es la más extendida, por lo que se utilizará como principal referencia para el análisis del problema de la pobreza en Venezuela.
En una economía de mercado, el estado tiene un rol muy importante que cumplir en la lucha contra la pobreza, para permitir un mayor grado de igualdad de oportunidades. Atacar el problema de la pobreza es una necesidad, no sólo por razones humanitarias, sino también por razones económicas.


Justificación de la Investigación

Debido a la creciente problemática que tiene implicaciones éticas, económicas y políticas los niveles altos de pobreza generan graves problemas sociales, entre ellos la exclusión de la mayor parte de la población, desnutrición infantil y criminalidad, al tiempo que afecta negativamente el desempeño económico del país debido a la ausencia de mano de obra calificada y el bajo nivel de demanda agregada asociados a la pobreza. Por lo que la investigación reviste de gran importancia al permitir conocer la situación de pobreza que existe en Venezuela.

OBJETIVOS DE LA INVESTIGACIÓN

Objetivo General
Determinar la situación de pobreza existente en el país.

Objetivos Específicos
Indagar sobre las causas de pobreza en Venezuela.
Recopilar información relevante sobre la pobreza en Venezuela.
Observar los niveles de pobreza en Venezuela.
Analizar la información recopilada.




CONCLUSIONES

Parece que hay distintas formas de interpretar la pobreza en Venezuela: "La pobreza urbana tiene que ver más con problemas de ingreso y la pobreza rural responde en mayor medida a la carencia de oportunidades para el desarrollo personal y familiar.

La utilización de las cifras económicas y sociales con fines políticos no es una novedad, ni es exclusivo de estos convulsionados tiempos, o de nuestro país. Las cifras, las de pobreza entre otras, constituyen una de las herramientas para auditar la acción gubernamental, así como el desempeño de toda la sociedad. Es por ello que cuando no se dispone de fuentes y cifras acordadas por todos, se suscitan discusiones públicas en torno a los indicadores que tratan de reflejar los aspectos mensurables de la realidad.

A finales de 2005 el INE anunciaba que la pobreza extrema en Venezuela sería del 10%. Hoy la Agencia de Noticias de Gobierno anuncia que la pobreza extrema redujo a 13.3% unos 6 puntos porcentuales menos de lo que estaba en 1999 y unos 4 menos del mejor momento de este gobierno, todas estas comparaciones hechas según las estadísticas del INCE y sus métodos.

Haber reducido la pobreza extrema 4 puntos menos de lo que ella sido en el 2001 puede ser consecuencia de una mezcla de los subsidios misioneros y el efecto derrame que ha alcanzado a los pobres dado el crecimiento económico de los últimos dos años.
Las encuestas de hogares arrojo que un 76.6% de hogares no son pobres y un 23.4% por su parte si lo son; entre los cuales hay un 14.3 % representado por pobres no extremos y un 9 % por pobreza extrema. La reducción de la pobreza se debe mayoritariamente a las becas educativas de las misiones (como declara el gobierno) los méritos se reducen, dado que estamos en presencia de un subsidio que no tiene contraprestación productiva y, por lo tanto, sólo se han atacado las consecuencias de la pobreza.

Cuando un gobierno se enfrenta a los gravísimos problemas de pobreza, exclusión y desigualdad que aquejan a nuestro continente puede toparse con la tentación justificada y teñida de buenas intensiones, que esconden las políticas de subsidios y de entrega masiva de comida, enseres o, simplemente, becas de subsistencia. Lógicamente en estas materias como en muchas otras los extremos suelen ser malos. No se puede pasar por alto que para ciertos grupos sociales, para las víctimas más crudas de la pobreza, es probable que sea absolutamente impostergable la necesidad de atender las consecuencias de su pobreza y, por ello, los subsidios y las becas gubernamentales son absolutamente necesarios para comenzar a crear condiciones para la superación de su extremo estado de necesidad.

Puede que la pobreza coyuntural, que la pobreza de ingresos se haya reducido, hasta estar cerca de los niveles de pobreza estructural, pero bastará una pequeña crisis fiscal (que por el bien de las familias beneficiarias de las becas ojalá nunca ocurran), para que la hoy reducida “pobreza estadística” vuelva a ser la “pobreza real” de antes.

Mientras no resolvamos las causas de la pobreza, semejante logro no será ni sustentable ni verdadero. A lo más, será una ilusión y volverá a ser cierto, hoy como ayer que la pobreza en Venezuela es atroz e injustificable en el sexto país exportador de petróleo en el mundo.

Aproximarse a las misiones puede ser algo clave en estos momentos pues ellas pueden estar develando algunos elementos que han estado ausentes de la escena venezolana desde hace algún tiempo. La participación popular. Las misiones adolecen de males que han sido comunes a los programas de acción social del Estado Venezolano desde hace varios gobiernos. Es común encontrar problemas de coordinación, de planificación, de asignación de recursos, de contraloría fiscal y de eficiencia en el gasto social. En este sentido, además de la tensión entre lo simbólico y lo eficiente que esta presente en las misiones, estas tienen también que lidiar con el Estado que, a pesar de diez años de gestión bolivariana, sigue siendo en buena medida cuarto- republicano. Algunas misiones no han logrado consolidarse en sus fases iniciales y empiezan a experimentar procesos de transformación que muchas veces no saben hacia donde apuntan. En lo referente a esta línea de las misiones, La cooperación con el gobierno cubano esta atentando contra su sostenibilidad.

Solucionar este problema es imperativo por razones de carácter económico, social y ético, y debe estar dentro de las prioridades de cualquier gobierno que quiera mantener la justicia y la gobernabilidad.